En Savage Worlds todo personaje cae en una de estas clasificaciones:
- Extras: Son los tipos sin nombre que no hacen más que estar por ahí pululando y/o acabar muriendo bajo la espada de los héroes.
- Protas: Los wild cards, los tipos molones que se llevan todo el protagonismo.
Extras duros (a.k.a Secuaces)
Los cuatro aventureros ya han cruzado todo el templo siniestro matando y aterrorizando a las hordas de esclavos del sumo sacerdote oscuro. Entonces, antes de llegar a él, aparecen dos enormes guerreros osgos: ¡la guardia del sumo sacerdote! Con una mirada siniestra y cargada de decisión se plantan ante la puerta que lleva al templo principal mientras preparan sus manguales. El combate promete ser duro.
El terrible guardaespaldas osgo, un buen ejemplo de secuaz. |
Los extras duros son un tipo de extra más resistente de lo normal. Suelen ser llamados Secuaces debido a su papel anónimo pero más molesto que el extra medio. Estos extras son resistentes y pueden aguantar bien los golpes, así que pueden soportar 3 heridas antes de ser incapacitados. Convierte a un extra en un extra duro cuando quieras que sea mucho más duro: quizás un guardia especialmente duro, un animal salvaje enorme o algo así.
Extras hábiles (a.k.a Manos Derechas)
Cuando los aventureros son rodeados por una emboscada de hombres rata parece que su fin está cerca. Pero de entre toda esa masa de pelo, dientes y grotescas armas muy afiladas surge un tipo grande, con muchas cicatrices. Se queda mirando fijamente a los aventureros y les grita: 'Yo ser Skitta Calaveraroida. Mi amo Ik'hik ordenar vuestra muerte y yo cumplir lo que mi amo ordenar. ¡Matadlos! ¡Matad a esas cosas-hombre!'
La mente pensante entre los planes del jefe y su realización. |
Los extras hábiles son un tipo especial de extra que no llega a ser un Prota pero que tiene algo de su potencial. No suelen ser demasiado resistentes pero tienen algo de protagonismo y pueden llegar a ser un dolor de muelas. Los Extras hábiles (que suelen ser conocidos como Manos Derechas debido a su papel secundario pero relevante) tienen estos beneficios:
- Lanzan el dado salvaje en sus tiradas.
- Pueden escoger ventajas sólo accesibles para Protas.
Extras pusilánimes (a.k.a Esbirros)
Llegar hasta el corazón de la guarida del gran nigromante ha sido duro, pero tras innumerables peligros y calamidades los aventureros alcanzan su destino. Ahí está, sentado en mitad del osario más grande que jamás hayáis visto. Al veros ríe, ríe descontroladamente mientras alza su casi cadavérica figura. A su son cientos de huesos se empiezan a montar en grotescas figuras animadas, cientos de esqueletos andantes que se lanzan a por vosotros.
Hordas y hordas de enemigos dispuestos a morir por su señor. |
Los extras pusilánimes son lo peor de lo peor. Débiles, cobardes y estúpidos. Pero tienen dos cosas a su favor: su ingente número y su total devoción por su señor. Es por esto por lo que suelen ser llamados Esbirros. Estos extras están un nivel por debajo de los extras comunes y aunque comparten todas sus reglas, tienen estas reglas especiales:
- Ninguno de sus atributos puede ser más alto de d6, aunque pueden ser menores.
- No pueden poseer más de cuatro habilidades y las cuatro están al mismo nivel que su atributo.
- Nunca pueden tener ventajas ni desventajas, aunque sí reglas especiales por su especie (en caso de tenerlas).
- Nunca pueden quedar Aturdidos. Si igualas o superas su Resistencia, quedan fuera de combate. Cualquier efecto que dejara Aturdidos a los extras pusilánimes (como un hechizo) también les dejará fuera de combate. Por otro lado los extras pusilánimes son demasiado estúpidos o están demasiado motivados como para ser afectados por cualquier Prueba de Voluntad (Test of Will).
- Finalmente, los esbirros protegerán a su señor con sus vidas. Para reflejar esto, cualquier extra pusilánime a 1'' de un Prota con el que esté relacionado (es su maestro o algo así) se convertirá en un peón, sacrificando su vida para que su señor pueda vivir. Cualquier ataque realizado contra dicho Prota es realizado, en cambio, contra el extra pusilánime, representando como este salta para proteger a su maestro.
¡Nos leemos!